La misma entrada marca el tono de la vivienda: a dos alturas, con ventanales verticales hasta el techo, y una escalera liviana, casi aérea, que parte del recibidor para conducir al segundo piso. Desde el exterior, estos ventanales adquieren carácter escultórico.
TIPOLOGÍA
Obra nueva
UBICACIÓN
Santa Cristina d’Aro
SUPERFÍCIE
400 m2 construidos
512 m2 parcela
ARQUITECTURA
Jordi Serra, Trinomi
FOTOGRAFÍA
Sergio López
AÑO
2019
El interior y el exterior se funden en esta vivienda amplia y cómoda, construida para una familia en la Costa Brava. La luz inunda todas las estancias, lo que llena de vida las estancias, abiertas al paisaje.
La construcción muestra volúmenes claros y definidos. Un segundo piso en voladizo añade metros cuadrados a esta vivienda, muy espaciosa en relación con la superficie de la parcela.
Las paredes de piedra placada del primer piso anclan la construcción al terreno. También recogen y dan intimidad a la terraza, y que dotan de personalidad al voladizo sobre la entrada del garaje, que queda en un discreto nivel inferior.
El toque mediterráneo de la piedra se disfruta también desde el interior. La piedra desnuda se muestra en la gran sala central, con salón, comedor y cocina abiertos e interconectados.
El suelo porcelánico en masa corrido en toda esta gran estancia contribuye a la sensación de espacio y diafanidad. Es además un material de poca absorción, inmune a las rayadas, perfecto para un espacio familiar con mucho tránsito.
El arquitecto ha sabido dotar a esta residencia de detalles de diseño que consiguen hacer especiales todos los espacios. Un simple pasillo convertido en mirador, un distribuidor con vistas al exterior y revestido de piedra, una terraza con cualidades escultóricas…
Desde Interdico, hemos ejecutado a la perfección todos los requisitos que marcaba el plano arquitectónico. La vivienda consigue transiciones perfectas entre materiales, aislamiento a pesar de estar tan abierta al exterior, y practicidad para que sus propietarios disfruten cada minuto que pasan en su casa.